FUCK YOU

Give me everything tonight.

Cariño, yo te quiero.

¿Quieres saber algo? Él no me gusta ni la mitad de lo que me gustas tú. Él no me hace sonreír de la misma manera que lo haces tú, ¿qué por qué? Yo tampoco lo sé. Sólo sé que lo sé, suena irónico pero es así. ¿Qué por qué estoy con él?No estoy con él, es solo uno de esos royos fugaces para no sentirte sola, para tener alguien en quien pensar, alguien con quien hablar por las noches, pero uno más, así sin mas remordimientos, uno más. Punto y final. Me habia acostumbrado a estar sin tí, puedo estar dos semanas seguidas sin dirigirte una sola palabra agradable. Pero no puedo estar dos semanas sin mirarte, sin sonreir cuando de vez en cuando me pones una de tus caras.Eres tú, y tu puta facilidad para hacer que el mundo se pare cuando creo que me estas mirando.

 

Haces que cada cosa sea de un color diferente.

Yo no sé si se puede quererte más fuerte.

Y recuerdo todos lo días, esa canción que susurrabas al despertar.

En la que decías que me querías.

Me levanto, me siento a su lado y le doy un abrazo. Largo, larguísimo, con los ojos cerrados. Un abrazo totalmente libre. Y el viento intenta pasar entre nuestros brazos, nuestra sonrisa, nuestras mejillas, entre nuestro pelo. Nada, no lo consigue, no pasa. Nada nos separa. Sólo oigo pequeñas olas que se rompen debajo de nosotros, la respiración del mar, que hace eco en nuestras respiraciones, que saben a sal. Y a ella. Y por un instante tengo miedo. ¿De tener ganas de perderme otra vez? ¿Y después? ¿Qué pasará? Bah. Me relajo. Me pierdo en ese abrazo. Y abandono ese pensamiento. Porque es un miedo que me gusta, sano.

La historia perfecta en ele estado de ánimo más tonto que jamás has sentido.Ahí está él, lejano y distante, de una manera que lo ves inalcanzable, no te dirige la palabra, te mira con odio… Un odio que ni siquiera él sabe si existe, pero la duda prefiere tratarte cómo a una mierda, comportarse cómo un cabrón y así intentar distanciarse de ti, porque sabe que te quiere, muy en el fondo, pero te quiero y sería incapaz de vivir en un mundo en el que tú no existas.Y ahí estás tú, preguntándote qué coño has hecho, por qué te trata así, cuando tu lo único que quieres es arreglar las cosas y que se dé cuenta de lo importante que es para ti. Pero, cómo eres una orgullosa y una cabezota prefieres dejar las cosas como están. Sabes que vas a sufrir y lo vas a pasar muy mal, pero eres fuerte y lo resistes todo… Lo resistes todo menos la tentación, y sientes que cada día te tienta más y que lo hace a propósito y todo lo que quieres hacer es olvidarlo todo y volver a empezar, de manera que los dos os dejéis llevar.

Os dejéis llevar por lo que sentís u que veáis que os queréis como nunca se ha querido nadie.

Y sin querer no quise, no conseguí, no hice: dejarlo todo a un lado.

-No puedo más-dijiste- algo aquí dentro insiste: soy un barco varado.
+Perdóname, no entiendo eso que estás diciendo, dejemos todo claro.
-Cariño yo te quiero, pero por dentro muero. Mi estrella se ha apagado. Somos barcos varados.
Y ahí caí profundo al hielo en un segundo,
-No hay nada más que decir, se queda conmigo esta nada.
+Vete tranquila, sigue, busca otro mundo, vive. será mejor así.
-Última línea juntos, verso acabado. Punto.
+Miremos a otro lado, por si al final despierta, deja la puerta abierta, que se abre su agrado.
Y ahí quedo conmigo, un corazón dormido, dejando de latir, intenta seguir y se apaga. Me faltaron versos, asumo, sigo preso. Algo más que decir: no puedo seguir si me faltas.

Vete tranquila. Sigue. Busca otro mundo. Vive.

Y de tu mano podré caminar. Y aunque se pase toda mi vida yo te esperaré.

Ser sólo lluvía, que vuelve a llover.

Dejarse llevar suena demasiado bien.

Ríe, salra, grita, hasta que no puedas más, hasta que te duela el cuerpo, hasta que todo el mundo te escuche.

Que todo el mundo escuche que eres tú, que eres quien quieres ser. Que eres la que ríe de rabia y llora de alegría, la que baila hasta que le duelen los pies, la que tiene ganas de sentir nuevas experiencias, de vivir sin límites, sin reglas ni normas, la que sabe que cada día es uno nuevo, la que piensa en lo que le queda por hacer.

Ojalá todo fuera tan facil como cerrar los ojos y bailar.

No siempre es fácil ver los colores reales de alguien. A veces tienes que mirar debajo del barniz masculino para encontrar un frágil ego, debes ignorar el brillo de una joya para saber que es una copia, debes sacar la verdad de la oscuridad para ver la belleza de una sonrisa. Sí, la gente esconde su verdadera naturaleza todos los días y, tristemente, siempre nos damos cuenta cuando ya es tarde.

Sabrás, que cualquier día, a cualquier hora, me puedo ir de tu vida tal y como llegué, sin esperarlo, con fuerza y de repente. Para ese día ya habrás descubierto que es inevitable cogerme cariño. Pero no te preocupes, cuando me vaya ya me conocerás lo suficiente y sabrás qué hacer para que vuelva, sino lo sabes ya.

Hola, ¿te acuerdas de mi? Soy la misma con la que solias charlar todo un dia sin cansarte hasta altas horas de la madrugada, la que te echaba de menos si un día no sabia de ti, soy exactamente la misma y todos los dias me pregunto si no echas de menos tú también todos esos momentos, aunque solo sea por un instante.

Dame la mano. Vayámonos. Viajemos aquel lugar en el que estuvimos hace tanto tiempo, que apenas lo recuerdo. Sólo sé que me sentía maravillosamente bien. Vayamos aquel sitio en el que el sol y las estrellas brillaban más que en ningún otro. Donde era díficil distinguir si era de día o de noche. Donde mi sonrisa no se escondía, perduraba horas y horas, y donde tu mirada me hacia sentir realmente especial. Sólo quiero volver a aquel lugar. Allí donde solo estábamos TÚ y YO.

Lo contaré deprisa, para que lentamente llegue a tu sonrisa.

Lo siento pero no te quiero.

Hace poco, aprendí algo nuevo. Aprendí a mirar el lado bueno de las situaciones, a arriesgar una vez más, a seguir adelante sin tener miedo. Hace poco aprendí que sólo existe una persona que da al insulto "inútil" un sentido diferente al que tiene, consigue que esa palabra suene distinta, y con cariño. Aprendí que no hay nadie más que sea capaz de besarme de esa manera, y de susurrarme al oído como lo hace él. Comprendí que no quiero que nadie, nada más que él, me bese el cuello, haciendo que miles de mariposas revoloteen en mi estómago. Caí en la cuenta de que me ha hecho sentir cosas que no he sentido con nadie. Fuí consciente, en el mismo instante en el que se me acercaba poco a poco, mirándome a los ojos, me cojía de la cintura, y le temblaba la voz al decirlo, fuí consciente de que le echaría de menos muchísimo, que me acordaría cada puñetero minuto de mi vida de ese instante en el que casi echo todo a perder, pero lo que más me dolería, sería no saber todos los acontecimientos que después de esto ocurrirían. Y ese hubiera sido uno de mis peores errores, que gracias a él no he cometido

Sí, soy impulsiva, gritona y pasota. Igual debería ser cómo tú, me irían mejor las cosas, ya que nunca me veras dedicandote una sonrisa especial, ni mostrandote un poco de cariño. Igual debería aprender a dejar de lado esta locura que me convierte en la persona cabezota que soy y dejar que em enseñes a ser como tú, a aprender de tí.

Tuve que aprender a ser sin tí.

Nosé si tengo que pasar página, o, simplemente, cambiar de libro.

Estas lágrimas son páginas en blanco, escribe ahora que tienes tanto.

Hablé con el hombre que ví en el espejo, me dijo:
-Deja que vuele y se vaya lejos.

Quisiste todo, perdiste tanto.

Te quiero, te quiero sin poder remediarlo.